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GUACIMARA HERNÁNDEZ: AMOR SANO VS. AMOR TÓXICO

GUACIMARA HERNÁNDEZ: AMOR SANO VS. AMOR TÓXICO

 

 

Es necesario distinguir entre un amor tóxico y un amor sano, ya que en los tiempos que corren, es algo que se vive con mucha frecuencia y que, además, nos cuesta mucho identificar. En muchas ocasiones, no sabemos qué nos está pasando hasta que tenemos este tipo de información cerca.

 

Inevitablemente, desde nuestra niñez, se nos inculca a todas las personas la concepción del amor como algo bueno o positivo… Pero, no se nos explica que hay variantes en aquello «bueno o benévolo» que caracteriza el amor. Cierto es que tampoco solemos preguntar, cuando somos niñ@s todo nos parece lo correcto, y no es hasta en edades más avanzadas, cuando contamos con más conocimiento y experiencia, que empezamos a cuestionarnos muchas cosas.

 

En este sentido, la vida en pareja o la convivencia, es la experiencia más influenciada y que más puede afectarnos; dado que, desde que somos chicos, tampoco se nos enseña a convivir con otros más que con nuestros familiares, y los conflictos que solemos tener en esta época los vemos como normales y que nos pueden pasar en un futuro en pareja.

 

Olvidamos que el amor como tal, más que un sentimiento, es una idea, y que esta puede ser concebida de diferentes formas por cada persona. Es decir, existe una inevitable concepción subjetiva del amor. El amor, el verdadero amor no duele, no hace daño, solo crece y evoluciona en el mismo sentido de la vida, con cosas buenas y cosas malas, pero siempre en constante evolución.

 

Damos mucha importancia al «concepto» del amor, y muy poca a su «práctica». Predicamos que el amor es bueno, pero… ¿Damos un buen amor? ¿Recibimos un buen amor?

 

Aquí juega un papel clave la responsabilidad emocional y el conocer que somos responsables tanto de lo que damos como de lo que dejamos entrara nuestras vidas.

 

Las parejas deberían hablar sobre el funcionamiento y desarrollo de su relación más a menudo. Ya sea de lo que está pasando en cuestiones que preocupan, o simplemente de lo maravilloso que va todo. Si hay comunicación, hay cambio y hay respeto. Es una cadena que va anclada en la vida.

 

El simple hecho de creer que “el amor no tiene fin” o que “si hay amor todo irá bien» es ya un ingrediente peligroso en cualquier relación. Esto lleva a lo que conocemos como dependencia emocional, y es uno de los factores más peligrosos de una relación, ya que, solo será consciente de su presencia la persona de la relación que no la sufre.

 

De esta manera, se crea un amor tóxico que no evoluciona. Solo avanza una parte de la pareja, la otra se queda estancada, y lo hace en una constante tristeza que, también cabe destacar, que se llega a normalizar.

 

Hoy en día, donde el mundo se encuentra tan frágil y sentido… Es importante cuidar todos los elementos que conforman una relación, trascendiendo siempre del amor al respeto, y así asegurar nuestra paz integral.

 

En el momento en que una pareja note que hay algo que falla, que el amor no les está uniendo, sino que, les está alejando, es hora de pedir ayuda, de volver al respeto, o de cada uno coger su camino con destino a la felicidad.

 

 

Guacimara Hernández, psicóloga y miembro de Doctoralia.